domingo, 2 de mayo de 2010

"El guardián entre el centeno" de J.D. Salinger

La próxima reunión del club de lectura tendrá lugar el martes 25 de Mayo a las 19:30 horas. En ella comentaremos "El guardián entre el centeno" de J.D. Salinger.

En 1951, el escritor estadounidense J. D. Salinger revolucionó a la sociedad de su país a través de “El guardián entre el centeno”, una novela traducida a más de cuarenta idiomas que no estuvo exenta de algunas polémicas generadas por el tono provocador y directo que el autor utilizó para retratar tanto la sexualidad como la ansiedad de los adolescentes.
La obra, escrita en primera persona, narra las vivencias de Holden Caulfield, un adolescente que ha sido expulsado de una de las tantas escuelas por las que ha pasado. Durante los días previos, el joven no sólo se disgusta con su profesor de historia, sino que también pelea con su compañero de cuarto y rechaza al ocupante de la habitación contigua por considerarlo molesto y poco higiénico.
Lejos de aceptar su realidad e intentar mejorar su conducta, el protagonista decide escapar a Nueva York, donde continuará sumando problemas. En esa aventura, Holden miente, intenta satisfacer sin éxito sus deseos sexuales con una prostituta, discute con quienes aceptan su compañía pero también se acerca a su pequeña hermana y le revela su sueño de convertirse en el guardián de un campo de centeno ubicado al borde de un precipicio donde evitaría que los niños que jueguen en él caigan al abismo.

3 comentarios:

  1. Alguien hace poco me dijo: "Todos somos Holden buscando respuestas, rompiendo vidrios ante la incomprensión por la muerte y el desconsuelo de crecer"
    Creo que no hay palabras mejores, así que aquí las pongo junto con unas propias: Ójala la libertad esté en poder elegir lo que queremos, no en tener la posibilidad de elegir cualquier cosa.

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  2. Ha sido, como el protagonista, una lectura difícil y con la intriga de seguir leyendo porque a pesar de que no me estaba pareciendo interesante algo me decía que debía seguir.

    Y la última parte del libro sí que ha sacado (para mí) lo mejor del protagonista, como cobra especial protagonismo la familia, con la figura de la hermana, el valor de los pequeños gestos (como la donación a las monjas), a pesar de todo, este loco Holden Caulfield no hace más que analizar su entorno para desde un punto de vista ácido buscar su posición y su camino en la vida.
    Esconde un fondo moralista como aquel guardián que entre el centeno es capaz de salvar a esos "niños" que corren, camino de un precipicio del que son ajenos.

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  3. Holden Caufield es un niño rico, hijo de un abogado, tiene dos hermanos: una niña muy inteligente y un hermano mayor, escritor en Hollywood; Allie, cuyo recuerdo aparece en la novela, murió de leucemia. No es un joven muy aplicado, casi nada le gusta. Es arisco, aunque en el fondo tiene buen corazón. Es absolutamente insufrible, un chico al que nada le importa, todo el mundo le parece “imbécil” y poco “auténtico”, incapaz de otorgar valor a las cosas. Cuando es expulsado del colegio Pencey, donde estudia, tres semanas antes del final de trimestre, decide regresar a Nueva York y vagar por ahí para que sus padres no se enteren de la expulsión. Durante su periplo, se suceden cosas como: una cita con una prostituta en un hotel; queda con una amiga, van al cine; regresa a su casa a escondidas, habla con su hermana; se aloja en casa de un profesor de donde huye tras sorprenderlo acariciándole la cabeza mientras duerme. Una historia salpimentada con las opiniones y los recuerdos del joven acerca de su familia, amigos y conocidos. Narrada en primera persona, se trata de realizar este viaje a Nueva York a través de los ojos y pensamientos del joven. Nos permite conocer de primera mano todo lo que se le pasa por la cabeza, su forma de pensar, su carácter: no es un joven agradable, sino contradictorio, arisco, cambia de un estado depresivo a una locuaz alegría en cuestión de segundos. Holden llena todas las páginas con su personalidad: todo le parece mal, nada le gusta, todo le deprime, es hipercrítico, muy maniático. Solo tiene palabras amables para su hermana. Cuando ella aparece se pone tierno. De hecho, en el fondo es muy cariñoso, pero esta especie de rebeldía adolescente lo tiene algo desorientado.
    El estilo narrativo está en consonancia con el carácter del protagonista: bastante simple, lleno de interjecciones, coloquial, abundantes calificativos despreciativos: estúpido, imbécil, asqueroso...; de continuas expresiones como "jo". La novela se publicó en 1951 generando controversias por su lenguaje provocador, sus referencias a las drogas, el alcohol y la prostitución. Divida la opinión del Club de Lectura, para algunos resulta una gran obra, para la mayoría poco cercana, y sin apenas trascendencia en la actualidad.

    Pedro M. Domene

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