
Tras cursar en Madrid las carreras de Filosofía y Letras y Derecho, se trasladó a Berlín en 1930, donde realizó estudios de filosofía política y sociología. Dos años después obtuvo la cátedra de Derecho Político en la Universidad de Madrid y formó parte del núcleo de intelectuales agrupados en torno a la Revista de Occidente. Exiliado como consecuencia de la Guerra Civil, en 1960 regresó a España, aunque no se estableció de forma definitiva hasta veinte años más tarde. Entre su obra narrativa, fundamental en el desarrollo de la literatura española del siglo XX, destacan los libros de relatos Los usurpadores (1949), La cabeza del cordero (1949), Historias de macacos (1955), El rapto (1965) y El jardín de las delicias (1971), y las novelas Muertes de perro (1958) y El fondo del vaso (1962). Académico de la Lengua Española desde 1983, ha obtenido, entre otros, los premios de la Crítica, Nacional de Literatura, el Nacional de las Letras Españolas, el de s Letras Andaluzas y el Premio Cervantes.